Nahia Alkorta fue víctima de violencia obstétrica. Sufrió trastorno por estrés postraumático. Presentó una demanda que recorrió todas las instancias judiciales sin ser escuchada. Pero el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer de la ONU le dió la razón e instó a España a adoptar medidas para erradicar la violencia obstétrica.

Intersecciones es uno de los últimos trabajos desarrollados por el colectivo y se ha materializado en una colección de fanzines autopublicada. Con un mismo formato y número de páginas, generamos siete relatos individuales en torno a distintos significados personales y culturales sobre la carretera, explorando narrativas visuales diferentes relacionadas con uno de los símbolos de la modernidad, que ha modificado radicalmente y de manera acelerada el territorio y los modos de habitarlo, y que constituye, por lo tanto, un "punto de catástrofe".

Intersecciones es uno de los últimos trabajos desarrollados por el colectivo y se ha materializado en una colección de fanzines autopublicada. Con un mismo formato y número de páginas, generamos siete relatos individuales en torno a distintos significados personales y culturales sobre la carretera, explorando narrativas visuales diferentes relacionadas con uno de los símbolos de la modernidad, que ha modificado radicalmente y de manera acelerada el territorio y los modos de habitarlo, y que constituye, por lo tanto, un "punto de catástrofe".

Diálogo con el prologuista Javier Bassas Vila, prologuista del libro y traductor de un sinfín de obras de Jacques Rancière.

¿Por qué los partidos de extrema derecha ocupan las primeras filas en casi todas partes? ¿Por qué sus ideas se extienden por las esferas académicas, gubernamentales y comunicativas?

Este libro lo explica a partir del colapso de la izquierda. Aquella que creyó que la caída del ecosistema soviético en 1991 iba a devenir en una democracia liberal planetaria que, con sus más y sus menos, garantizaría un progreso apacible de la humanidad.

Sin embargo, a lo largo de las tres últimas décadas, los poderes realmente existentes han gangrenado la libertad y la democracia. Han empequeñecido el reparto de la riqueza y, para conseguirlo, ha resultado imprescindible la colaboración de amplios sectores de las élites políticas e intelectuales progresistas, que han transformado sus esperanzas frustradas en un profundo resentimiento contra todo lo que las hubo alimentado.

Para esa izquierda, la clase obrera conforma un populacho superado por la modernidad y la tecnología, incapaz de desprenderse de privilegios arcaicos y cuya nostalgia la asimila a la extrema derecha identitaria y racista. Al mismo tiempo, es la izquierda que defiende un Estado de seguridad que supuestamente protege a la población de las amenazas acechantes pero que, por el contrario, no para de reforzar el miedo, el odio y la persecución de chivos expiatorios. En definitiva, la izquierda que ha arrinconado la lucha de clases y que apuesta por un Estado de seguridad, va a amalgamarse con el racismo distinguido de los hombres poderosos y con el racismo vulgar de las clases subalternas alienadas.

Entonces, ante esta contrarrevolución en marcha, ¿qué hacer? Rancière tiene unas cuantas propuestas.

Diálogo con Javier Bassas Vila, prologuista del libro y traductor de un sinfín de obras de Jacques Rancière.

¿Por qué los partidos de extrema derecha ocupan las primeras filas en casi todas partes? ¿Por qué sus ideas se extienden por las esferas académicas, gubernamentales y comunicativas?

Este libro lo explica a partir del colapso de la izquierda. Aquella que creyó que la caída del ecosistema soviético en 1991 iba a devenir en una democracia liberal planetaria que, con sus más y sus menos, garantizaría un progreso apacible de la humanidad.

Sin embargo, a lo largo de las tres últimas décadas, los poderes realmente existentes han gangrenado la libertad y la democracia. Han empequeñecido el reparto de la riqueza y, para conseguirlo, ha resultado imprescindible la colaboración de amplios sectores de las élites políticas e intelectuales progresistas, que han transformado sus esperanzas frustradas en un profundo resentimiento contra todo lo que las hubo alimentado.

Para esa izquierda, la clase obrera conforma un populacho superado por la modernidad y la tecnología, incapaz de desprenderse de privilegios arcaicos y cuya nostalgia la asimila a la extrema derecha identitaria y racista. Al mismo tiempo, es la izquierda que defiende un Estado de seguridad que supuestamente protege a la población de las amenazas acechantes pero que, por el contrario, no para de reforzar el miedo, el odio y la persecución de chivos expiatorios. En definitiva, la izquierda que ha arrinconado la lucha de clases y que apuesta por un Estado de seguridad, va a amalgamarse con el racismo distinguido de los hombres poderosos y con el racismo vulgar de las clases subalternas alienadas.

Entonces, ante esta contrarrevolución en marcha, ¿qué hacer? Rancière tiene unas cuantas propuestas.

Sinesgarria al da ustez askatasun gosez bizi den herri zahar honek bere erraietatik sortutako hainbat pentsalari sakoni bizkarra ematea? Geureak omen diren erakundeek berauek baztertu eta ezkutazea? Halako askatasun-sortzaile asko nahi (eta behar) ditugu munduan duintasunez ibiltzeko. Gure memoria historikoa geurea eta geuretzat izan dadin, ahoz, irakurriz eta idatziz.

Sinesgarria al da ustez askatasun gosez bizi den herri zahar honek bere erraietatik sortutako hainbat pentsalari sakoni bizkarra ematea? Geureak omen diren erakundeek berauek baztertu eta ezkutazea? Halako askatasun-sortzaile asko nahi (eta behar) ditugu munduan duintasunez ibiltzeko. Gure memoria historikoa geurea eta geuretzat izan dadin, ahoz, irakurriz eta idatziz.

Ciencia y ficción es un fotolibro que reflexiona sobre cómo la ciencia y la religión crean ficciones en torno a la inmortalidad para afrontar la muerte. La religión nos ofrece el cielo y la vida eterna mientras que la ciencia avanza al servicio de seres cada vez más longevos.

En enero de 2019 me diagnostican cáncer. La enfermedad alberga un miedo lúcido, un tiempo que parece detenerse y correr a toda velocidad por igual, como el gato de Schrödinger esta muerto y vivo en el mismo lugar.

Este tiempo de espera se llena de afectos, que se presentan en las hojas de una agenda por la importancia del tiempo en la enfermedad. Un ejercicio de aceptación de la vulnerabilidad, el tiempo de vida en pausa y la pérdida de salud. Fotografías que muestran el cuerpo como registro que guarda lo que acontece.

Un relato que reivindica los cuidados de los unos a los otros, para llegar a ser personas inmortalmente más humanas.

Ciencia y ficción es un fotolibro que reflexiona sobre cómo la ciencia y la religión crean ficciones en torno a la inmortalidad para afrontar la muerte. La religión nos ofrece el cielo y la vida eterna mientras que la ciencia avanza al servicio de seres cada vez más longevos.

En enero de 2019 me diagnostican cáncer. La enfermedad alberga un miedo lúcido, un tiempo que parece detenerse y correr a toda velocidad por igual, como el gato de Schrödinger esta muerto y vivo en el mismo lugar.

Este tiempo de espera se llena de afectos, que se presentan en las hojas de una agenda por la importancia del tiempo en la enfermedad. Un ejercicio de aceptación de la vulnerabilidad, el tiempo de vida en pausa y la pérdida de salud. Fotografías que muestran el cuerpo como registro que guarda lo que acontece.

Un relato que reivindica los cuidados de los unos a los otros, para llegar a ser personas inmortalmente más humanas.